Soñado para Interceder

En medio de un sueño, estaba yo en un pueblo donde existían muchos comercios y fui acompañar a alguien a comprar comida, y a los sitios que íbamos estaban cerrando y preguntábamos por pan, el precio que daban era muy caro y yo pensaba que si tenía que comprar solo podría comprar uno, pero las personas a quien acompañaba compraban mucho.

El lugar donde me encontraba se preparaba para algo que yo desconocía pues era desconocido o muy poco frecuentado por mí, en principio me sentí extraño, aún y cuando habían personas que me conocían. Luego de comprar el pan nos dirigimos a una cancha como de fútbol; el cual se ubicaba en un valle rodeado de montañas llanas, en ellas muchas personas simulaban un ataque enemigo, en estas se encontraban personas muy hábiles a las cuales observe detalladamente. Las mismas se desplazaban bajo estrategias y adoptaban posiciones de ataque bajo la dirección de una persona que fungía como seleccionador o director técnico. Así cumplían las practicas un grupo y luego seguía otro.

Una vez observado las practicas decidí retirarme a mi casa, pasado el tiempo una persona me pide ir a la casa del director técnico de aquel grupo a solicitud de este, y aquellas personas que realizaban aquellas practicas de combate se encontraban en el lugar y me reciben como si fuese conocido y comparten las impresiones de lo que será su futura victoria.

De repente y como en cualquier película de acción, anuncian que los enemigos para la cual se preparaban se encontraban cerca y todos corren a sus posiciones en aquel lugar del valle, Inmediatamente el miedo me invadió y salí del lugar a ver que ocurría y observe que todos corrían preparándose para un ataque, fije mi mirada a lo alto de aquellas montañas llanas y vi como un gran ejercito nos rodeaba, era IMPRESIONANTE!, sentía mucho miedo y solo quería volver a mi casa.

 En ese intento y camino de salida, sale a mi encuentro una mujer Profeta con un rostro sonriente y de postura firme, a su vez me dice con mucha calma: Obtendremos la Victoria!.

Al observar nuevamente las montañas aquel ejercito (enemigo), se mantenía rodeándonos. En ese momento comienzan a sonar truenos, destellando llamas y fuego alrededor, tal cual una escena apocalíptica.

En el centro del pueblo o en medio de aquella cancha, camino a casa; empece a ver que aparecían armas y las personas que se encontraban en ese lugar las tomaban rápidamente. Estaban tan cercas que decidí tomar unas, en especial había una especie de garra de León que no sabia como usar, pero tome una que se ajustara a mi tamaño; también tome una lanza en medio de otras armas.

Siguiendo aquel camino me di cuenta que la garra tenía dos propósitos (Defensa y Ataque), empece a probarla y ajustarla a mi mano, aún invadido de temor por lo que ocurría en aquel lugar; sin embargo a poca distancia de mi retirada aquel pueblo se sumergió en un gran silencio esperando atacar, y como en una historia bíblica se inició una batalla. Todo era muy tenebroso y oscuro, el ejercito enemigo bajo hacia el pueblo efectuando ataques en todas direcciones, los mismos eran como celajes espirituales hacia las personas que habitan ese lugar. 

Luego de un tiempo se produce un gran silencio denotando un repliegue de aquellas tropas enemigas (celajes espirituales), sin haber victimas en el pueblo producto de aquel ataque. En ese mismo instante quise correr y ocultarme los más lejos posible de las bestias que bajaban al pueblo, y al intentarlo pude ver como los guardias del pueblo, aquellos que estuvieron preparándose para un ataque empezaron a tomar posiciones como aguardando el momento exacto de su ofensiva.

El ejercito que se encontraba en el pueblo eran personas impresionantes, un gran ejercito con armaduras, muy bien formados, con habilidades o poderes sobrenaturales, pude pasar cerca de ellos en mi retirada.

Una vez fuera del perímetro de aquella batalla y en mi huida, siento una tensa calma y nuevamente un gran silencio, este gran ejercito empezaba a concentrarse en el centro del pueblo. En mis pensamientos no era mi guerra, no sabía porque estaba allí pero sentía que era mi tierra.

Luego de aquel silencio a lo lejos empieza a sonar un instrumento que paralizó mi caminar...y poco a poco comencé a sentir una gran energía de poder dentro de mí. 

Luego de todo aquello el lugar fue estremecido con un gran canto y en cada nota musical proyectaban líneas de ataque muy bien definidas por aquellos guerreros. Cada quien sabía su lugar, se conformaban grupos de ataques en cada uno de ellos con objetivos claros. Y así de esa forma y antes de que dieran la voz de ataque explotó en mí a lo lejos una fuerte voz que decía: Adoraciooooooooooooón......! y con gran fuerza y valentía salí corriendo hacia el pueblo, con gran arrojo y determinación a pelear, sin dudar, sin temor, con mi lanza y garra de León a enfrentar al enemigo.

En aquella batalla el enemigo empezó a caer como aquella estatua del dios de los filisteos "DAGÓN". Luego el ejercito empezó avanzar hacia otros lugares, desmontando lugares altos y liberando personas.

¿Esto en realidad fue un sueño? o ¿una revelación?. Es una realidad que desconocemos o no la queremos afrontar, ¿puedo seguir en mi sueño? No lo sé.

Lo que si se, es que al despertar no quise olvidarlo y ore a Dios por ello, como no lo hacía en mucho tiempo, y sentí tomar la biblia y me dirigí a la siguiente palabra: "Alabanza por el favor de Dios hacia Jerusalem". Salmos 147. "No hay mayor poder para un intercesor que la Alabanza y la Adoración".

Dios es un Dios de propósito y te escogió para un momento especial y en todo este tiempo ha estado preparándote y en su momento sabrás para que fuiste escogido.

Por: Edwin Mendez