Hazme Oir
01.04.2019

Cuando ya nada te llena, cuando las ideas no llegan y sientes vacío en tu corazón... es como sentir la ausencia de Dios y Clamar por una palabra de aliento es una necesidad para sustentar tu día. En ese momento "Extendí mis manos a ti, mi alma a ti como la tierra sedienta. Hazme oir por la mañana tu misericordia porque en ti he confiado". Salmo 143. 6-8. Y así llegas tú mi Dios con brisa suave, tus palabras me fortalecen y mi corazón se alegra al escuchar tu voz.